Si no te atreves a saltar en un barranco, no pasa nada grave. La mayoría de los saltos en barrancos se pueden superar utilizando cuerdas, lo que elimina la necesidad de hacer el salto. El barranquismo es una actividad que se puede adaptar a diferentes niveles de habilidad y comodidad, y la seguridad siempre debe ser la prioridad.
En casi todos los barrancos, los guías y los equipos de seguridad están preparados para asistir a quienes prefieren no saltar. Puedes utilizar cuerdas para rapelar o descender por los obstáculos de manera controlada. Esta opción no solo es segura, sino que también permite disfrutar del entorno natural y de la aventura sin sentir la presión de tener que saltar.
Así que, si en algún momento sientes que un salto es demasiado para ti, recuerda que siempre hay alternativas seguras para continuar la experiencia. No hay nada de malo en optar por la cuerda y seguir disfrutando del barranquismo de una manera que te resulte más cómoda y segura.